Horror

Santo Domingo.– El doble asesinato ocurrido en Villa Mella ha estremecido a toda la sociedad dominicana, reiterando la profunda crisis de valores y de atención a la salud mental.

Es inconcebible que un hijo termine con la vida de su madre y su hermano, un hecho que refleja fallas en los mecanismos de reinserción social y apoyo psicológico para exreclusos.

Más allá del horror del crimen, este suceso debe motivar una reflexión colectiva sobre la urgencia de fortalecer programas de prevención, educación emocional y salud mental comunitaria.

Solo atendiendo las raíces del problema podremos evitar que tragedias tan desgarradoras se repitan.