Apagones en aumento: crece la búsqueda de formas ingeniosas para conservar alimentos sin electricidad

Lo que para algunos comenzó como una molestia ocasional, se ha convertido en una crisis cotidiana que afecta tanto la calidad de vida de los residentes como la estabilidad económica de pequeños comerciantes.

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Santo Domingo.– La frustración crece entre los habitantes de sectores como Cristo Rey, La Ciénega, 27 de Febrero, Los Mina y Villa María, ante los prolongados apagones que se han intensificado durante las últimas semanas.

Lo que para algunos comenzó como una molestia ocasional, se ha convertido en una crisis cotidiana que afecta tanto la calidad de vida de los residentes como la estabilidad económica de pequeños comerciantes.

Durante la noche, cuando las temperaturas alcanzan sus niveles más altos, las interrupciones eléctricas impiden el descanso.

"Uno llega a la casa a descansar, pero con este calor y sin luz es imposible dormir", comenta una residente de Cristo Rey. La falta de electricidad ha obligado a muchos a abandonar sus hogares por las noches en busca de aire fresco, exponiéndose a otros riesgos.

Los comerciantes, especialmente dueños de colmados, pescaderías y pequeños supermercados, son algunos de los más afectados. La imposibilidad de mantener refrigerados productos como carnes, embutidos, queso y refrescos ha generado pérdidas económicas significativas.

"Tengo dos días poniéndole hielo a una carne para que no se dañe", explicó una vendedora, visiblemente molesta. "Se nos dañan las chuletas, el salami, se pierden muchas ventas. El cliente no quiere nada caliente".

Muchos negocios se han visto forzados a comprar hielo todos los días, mientras otros se han resignado a perder mercancía. "Aquí para mantener algo frío hay que estar metiendo fundas de hielo en el freezer. Es lo único que podemos hacer", aseguró otro comerciante.

Fallas técnicas en Punta Catalina agravan la situación

Los apagones han coincidido con las fallas técnicas reportadas en la planta de Punta Catalina, una de las principales generadoras del país. Aunque el Consejo Unificado de las Empresas Distribuidoras aseguró que se están realizando los trabajos necesarios para resolver la situación, los afectados no han visto resultados.

Mientras tanto, las amas de casa también enfrentan dificultades para realizar sus labores diarias. "Sin luz no se puede cocinar bien, no hay agua fría, no hay nada que alivie este calor", expresó una madre de familia.

  • Los residentes exigen respuestas concretas de parte de las autoridades. "Esto es todos los días, lo mismo. Nunca buscan una solución", dijo un vecino. "Ya no aguantamos más".


Preocupación por salud y seguridad

Además de las pérdidas económicas y la incomodidad, los residentes temen por su salud y seguridad. Las altas temperaturas, combinadas con la falta de ventilación y refrigeración, están afectando especialmente a niños, personas mayores y pacientes con condiciones médicas. "Mi mamá es hipertensa y no puede dormir con este calor. Se siente mal y no tenemos ni un abanico para aliviarla", relató una vecina de Villa María. Otros temen que la oscuridad prolongada aumente los robos y hechos delictivos en las comunidades más vulnerables.


Vladimir Núñez

Vladimir Núñez

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